Nuevo casino de uno de los "grandes" legionarios?

Acabo de leer esta noticia y creo que alguno de los integrantes del casino "portátil" del Mauri está haciendo rancho aparte ....

No recuerdo haberlo visto jugar, alguno dicen que es porque no lo dejan ...
Aunque también puede ser porque no soporta ver en el paño apuestas tan miserables que solo sirven para pagar una que otra factura de cable o comprarse un celular.

Advertencia

Estimados parroquianos de este devenido a menos casino (les diría, convertido en casa ambulatoria de comidas rapidas, de no ser por Cape, que sigue siendo un grosso).

Hemos agregado a nuestra ya historica pagina, al iniciarse ésta, un carte de advertencia sobre el contenido que se pudiera encontra al ingresar a navegarla.

Es que, aunque nos hagamos los hombresitos y sigamos diciendo que nos chupa un huevo que las mujeres entren a ver los posteos, creo que es de caballeros, (cosa que somos), y de machos, (cosa que tambien somos, salvo contadas dudas generadas a drede o por gente foranea a este grupete), y como tales (caballeros), debemos mantener ciertas cuestiones de buen gusto y advertencia para con la gente que sigue esperando que aparezcan posteos llenos de delicadeces y con alto valor academico, cosa que ya no pasa, salvo excepciones que invitan a soñar escritas por Fabito.

Como esto de los posteos profundos y con contenido ya cda vez son mas escasos, seguro seguro, van a aparecer cositas que, para llenar de alguna manera este espacio, no van a ser de buen gusto y lindantes con los buenos habitos y costumbres de caballeros, (que lo somos).

Y como el que avisa no traiciona, les avisé, este espacio puede contener posteos fuertes, duros, nudistas o de mal gusto...... (mierda, carajo!)

El mas grande de todos.

Fabito, como siempre, el mas grande de todos.

Sin mas, el Viejo (que sigue ingresando a este blog aunque haya varios ofendidos que ya no posteen)

MY WAY

Hace……no sé bien si poco o mucho tiempo atrás; es que existe esa guerra entre dos por ocupar el mismo lugar (gracias pelado) y me tiene entre los veinte arrogantes e indestructibles años y los cuarenta que mi ya amarillento DNI acusan; la Sta. C, profesora de inglés de la siete, me contó una historia que me sirvió casi de máxima desde ese momento.
El tema, y dejando de lado las connotaciones románticas, era que en la vida no había que quedarse con dudas. Había que probar. Después pelate la frente contra el paredón, o no, pero probá. Como carájo sabés que no te gusta el sushi si no lo probaste. Como sabés si saliste ganando por no ir a comer con tus amigos por que estabas cansado, si no fuiste; y nunca, jamás y bajo ninguna circunstancia, vas a saber si ganaste o no por el solo hecho que no estuviste ahí.
A lo que voy, es que no seamos esclavos de las dudas, que podamos mañana decir - si, lo hice, traté, probé o lo que sea, y gané o perdí, pero hay algo que no tengo y es la duda por no haber intentado.
Esa minita, la rubia de pelo lacio que estaba apoyada en la barra y nos miró una o dos veces de reojo y que por miedo no encaramos; nos habría dado bola? Ahora no lo sabemos, ya pasó y no la encaramos y nunca vamos a saber si la minita nos hubiera echado flit, o nos hubiese dado bola esa noche y nunca más, o si hubiese sido nuestra noviecita por algún tiempo, o si nos hubiese cambiado la vida. Pero no lo vamos a saber. Esa noche, por algo, no la encaramos.
Hagámonos cargo de nuestra vida. Tengamos la madurez para decir que hacemos lo que hacemos por que nos gusta. - Esto es lo que me gusta y lo hago. No es lo que me dijeron que haga, es lo que me gusta y es parte de lo que soy. Yo intenté o estoy intentando. Mañana podrán decirte que te equivocaste o no, pero no podrán decirte que no lo intentaste, que no probaste.
Por eso, como dice Pepe Sacristán en el monólogo final de Solos en la Madrugada, si tenés ganas ir al cine y tu esposo o esposa no te acompaña; “fíjate que sencillo, tómate el metro o un taxi, pide una butaca y ya está” viste la película que querías.
No nos mintamos más. Sabemos que tenemos que “ser” algo. Seamos lo que tengamos que ser. Hagamos lo que tengamos que hacer, pero sobre todo, hagamos lo que queramos hacer. Que cuando llegue la hora y Dios, o el ser de la creencia de cada uno, nos llame; hallamos vivido nuestra vida como decía (cantaba) Fanky; - A MI MANERA, no la que quisieron que la viva.