Dejemos de romper las pelotas con fiestas foráneas importadas por grupos de comerciantes inescrupulosos, con el solo hecho de poner en “nuestro” calendario un día más para que los más pelotudos gasten sus vituallas.
Y lo peor de todo es que no falta alguna esposa, novia y/o pareja, que se siente verdaderamente ofendida si uno no recuerda el 14 de febrero. Déjense de joder. Que lo único que buscan es aprovechar la fecha para recibir un regalo o una salidita extra; que por otra parte se suman al día de los novios, cumpleaños, aniversarios, etc.
BASTA. Es deber y hasta obligación de este insigne grupo de verdaderos machos indomables, comenzar una campaña para erradicar este mal que aqueja hoy por hoy a nuestra tierra.
NO A SAN VALENTIN, SI A LA FOGATA DE SAN PEDRO Y SAN PABLO
Volvamos a las celebraciones de nuestros abuelos y nuestra tierra y bajemos al puto de Cupido de un gomerazo y metámosle el arco y las flechitas en el orto.
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